Por contradictorio que parezca los meses a los que la población fue sometida a cuarentena, casi absoluta, al menos en gran parte del 2020, se tradujeron en un aumento de la demanda representada en mayores transacciones electrónicas de compra/ venta.
Es decir, el consumidor seguía exigiendo sus productos a pesar del confinamiento, pero muchas operaciones estaban paralizadas, por lo que prácticamente se estaba trabajando con el stock existente en cada país, haciendo creciente la necesidad de producir y transportar mercancía apenas fuera posible.
Por lo que como es natural crece la demanda, se dispara la oferta y comienzan a aumentar las importaciones/ exportaciones donde los contendores existentes no dan abasto.