Todo lo que tienes que saber de la marroquinería. ¿Qué es, orígenes y procesos?

Entre los primeros trabajos que se pueden estudiar en el origen de la humanidad nos encontramos con el tratado de pieles, era para los pobladores de ese momento una imperante necesidad vestirse, calzarse y crear demás utensilios que les permitieran sobrevivir a condiciones inhóspitas.

Ese oficio es el que conocemos hoy día como marroquinería, palabra que viene del termino francés Marroquín, que quiere decir marroquí, gentilicio de Marruecos, quienes eran los más hábiles para desarrollar esta práctica. Entendiéndose oficialmente como el tratamiento a la piel de origen animal por medio de la mano de obra humana y la adición de productos químicos naturales; es desde antaño una labor que se considera un arte que a pesar de la invención tecnológica que vivimos en la actualidad se sigue manteniendo viva gracias a la acción de muchos artesanos.

La marroquinería se fue diversificando a lo largo de los años, permitiéndoles perfeccionar la técnica y ampliar el catálogo de productos a billeteras, bolsos, tapas de libros, cinturones, maletines y por supuesto las tradicionales chaquetas y zapatos.

Orígenes de la Marroquinería.

Como bien dijimos la marroquinería es un trabajo que data de la antigüedad, el hombre en su afán de sobrevivir recurría a los recursos que la naturaleza le ofrecía, siendo los animales la principal fuente, en principio para alimentarse hasta que descubrieron que su piel también era aprovechable y fue en ese momento que empezaron a tratarla para con ello confeccionar piezas de su indumentaria.

Tiempo más tarde. Al menos 6.000 años Antes de Cristo dejo de ser una acción de mera supervivencia para trasladarse a otros fines de la cotidianidad como bolsos, cojines, decoración, monederos, sandalias más elaboradas, etc.

Por su parte los romanos en su imperio se valían de esta técnica para desarrollar toda la indumentaria de guerra incluyendo armaduras, espuelas, aparejos y demás herramientas.

Marroquinería en la actualidad.

Aun cuando la aparición de nuevos materiales y herramientas para trabajar el cuero han desplazado de cierta manera el oficio en su manera más ancestral, aún hay países que destacan por sus altos índices en producción de marroquinería, apelando a recursos naturales para curtir, conservar y aplicar color a la piel natural, tal es el caso de Marruecos, un líder en producción de cuero artesanal donde se mantienen las tradiciones a flor de piel.

Por su parte otros han decidido seguir con la producción de cuero pero apoyándose en las nuevas tecnologías que facilitan en gran manera la tarea, dando igualmente resultados bastante aceptables.

Y es que el cuero es hoy día uno de los materiales más valorados a nivel internacional por las múltiples bondades que ofrece y su versatilidad para adaptarse a la creación de diferentes objetos. Esto hace que constantemente sea expuesto en las mejores y más importantes ferias alrededor del mundo despertando el interés de productores, no solo relacionado con La Industria del Calzado y la Marroquinería, sino de mobiliario, automotriz, entre otros.

Procesos de Curtido en la Marroquinería Artesanal.

Como primer paso se procede a retirar el pelo de la piel del animal, se lava con agua y sales que evitan que se pudra para posteriormente ser sumergida por días en pozos de sal.

Comienza entonces la trasformación de piel a cuero con la adición de componentes vegetales o minerales en lo que se conoce como curtido.

·         Curtido vegetal: la piel es sumergida en pozos de taninos vegetales que proceden de la corteza de las plantas.

·         Curtido mineral: su creación se posiciona en el siglo XIX, se realiza a través del uso del cromo, dando como resultado un cuero de más resistencia y duración; pero es una actividad menos respetuosa con el medio ambiente.

Seguidamente se elimina el exceso de humedad que las pieles han absorbido en el proceso, para continuar con la fase de rebajado en la que se raspa la piel para dar un espesor igualitario.

Ya solo quedara exponer la pieza al sol para secarla y finalmente agregar aceites que le den el aspecto final; cabe destacar que algunos fabricantes optan por recurtir el cuero sobre todo si han utilizado un curtido mineral para dar aún más suavidad y resistencia al material.

Se cree que el tratado del cuero es sencillamente un arte, representado en un oficio complejo en el que se necesita de conocimiento y destreza para llevarlo a cabo dando como resultado un producto preciado en mudo sectores industriales, incluyendo el del calzado, esto es ¡La Marroquinería! 

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